martes, 27 de mayo de 2008

naturaleza más viva que muerta

Inventamos todo lo que ni en el mismo espacio completo existe, creamos tiempos paralelos en donde nadie ni nada nos podría robar siquiera un segundo. Somos Dios en la tierra y ni nosotros lo creemos, el cielo en el planeta, yo de luna, tú de estrella …

El suelo nuestra cama, donde entre árboles y rosales podemos hacer el amor, nubes que de velas se transforman y en vez de prender, apagan la luz. El oscuro ambiente nos rocía con siluetas de amor, el alcohol de lluvia alucina entre tanta pasión.

Caminas de par en par y olvidas un tinte, de color crema y quizás más blanco que la nieve que nos adormece. Texturas, plataformas y las rocas en terciopelo se modifican, de un frío tosco y duro, al placer más profundo.

Nos miramos sin los ojos y respiramos ventiscadas, separamos el nosotros y susurramos entre marejadas. Nuestro pañuelo un consuelo, tú mi vida y yo tú anzuelo …
y estamos en silencio …

… luego reímos en lo eterno.

viernes, 23 de mayo de 2008

Hace dos minutos he muerto y al tercero reviví...

Hace dos minutos he muerto y al tercero reviví, esta vez sin tu corazón encargado de mi cuidado por la noche ni tu mirada atenta durante el día para ver que hago.

Al primer minuto sentí un choque entre mi alma y mi razón, entre el verde más tierno y el negro más terco, sentí que el cielo caía sobre mi y que el suelo aplastaba mis sueños, hace dos minutos atrás fue el primero de tres y ese fue el que me hizo morir entre la pared.

Segundo minuto y quise llorar, destruir todo a mi paso, ser el peor fascista en mi cuerpo y el peor diablo en mis recuerdos, desde aquel supe que no volvería a soñar -volar-. Pensé que todo el esfuerzo había sido en vano, creí que el universo entero reía de mi y que la noche nunca más se despediría en el último claro.

El último, el tercero, fue donde el Sol me demostró que las cosas son cosas y el amor es amor, que el verde si lo combinas, en negro se puede transformar y que al mismo tiempo este lo puedes botar y volver a comenzar. En ese preciso minuto los temas en mi cabeza sonaban con mayor claridad y no era necesario esperar, donde miraba sin niebla y caminaba sin tiniebla. Un momento me detuve, pensé, recompensé tu actuar, luego te abracé y te dije; Adiós, no vuelvas, que cuando lo hagas sabrás lo que hiciste y ahí, yo estaré, pero no para volver, sino para decirte que este será el cuarto, para darle un quinto y en ese, darte el lápiz y te pongas a escribir …












...y yo espero a quien no conozco

jueves, 22 de mayo de 2008

Adios


Escucho y escucho y aún no logro encontrar una respuesta.

Tiemblo cuando escribo unas cuantas palabras que hablan, narran, viven y al mismo tiempo mueren en ti. Me da pena, debo aceptarlo. Muchas cosas me dan pena, esta me costó asumir.

Una plaza, un árbol que nos cobijó tantos momentos, un sol que se escondía para dejarnos solos y estrellas que como velas adornaban el dulce momento. Eran rocas nuestro sofá y flores los vientos que nos dejaban llorar. El reloj se detuvo después de diez años. Pasaron días y volvió andar.

Es triste volver al mismo lugar, ahora el sol no se esconde, si no que se escapó. La lluvia lo reemplaza y se queda y se adueña y me pega, no me suelta, me tortura entre fuegos y cenizas, entre tragos y noches que en un abrir y cerrar son días.

Me muero y vivo en el mismo aire que me soportó durante diez largos y míseros años. Las flores ahora las saco, hablo con ellas y les pregunto qué paso.

Siempre me hablaste, me amaste, me extrañaste y cuando estuvimos juntos, no me amaste, no me extrañaste, menos me miraste. Porque sé que es difícil mentir, también sé que es difícil decidir, si tu o yo.

Paso de largo tantas noches en una, conozco tanto el mar de cemento como te conocí cuando te vi por primera vez.

Y recuerdo y recuerdo y no puedo olvidar, cuando lo logre te llamaré y por última vez te diré, te amo.

Son diez, quince y veinte, quizás más. Son veinte, veinticinco, treinta, talvez los minutos que escribí, que aprendí, que por ti, yo no puedo vivir.

… lo único que sé, es que gracias a ti, todavía en las mañanas me cuesta levantarme …

… y que mi corazón es el único que aguanta este dolor

miércoles, 21 de mayo de 2008

adoquines y cigarros


Saco de mi bolsillo un cigarro. Me detengo, lo guardo y lo saco de nuevo. Insisto, lo enciendo y lo apago en poco. No entiendo, lo mato y lo prendo entero. Un poco, me levanto y camino por el sendero.

Tú chocas con mi hombro y mis ojos hacen el amor con los tuyos, en pocos y breves segundos nos olvidamos uno del otro. Por paso salpicaba y creaba una tormenta, por el llanto que derramaba y por la lluvia que me anunciaba.

Depresión, insólito, incluso algo de alucinación. Entre volver a fumar o sentarme junto al pasto. Conversar, llorar, luego mirar y decir mierda!, si todo es tan simple. ¿por qué a mi me acompleja?.

No quiero olvidar, y no es que no pueda, si se trata de tú corazón y no de mi cabeza. Intento seguir el paso de cómo cincuenta seres humanos, el problema surge cuando, se dividen y solo me dejan.

Silencio en la sala, todo está a punto de comenzar, me entregan una hoja y yo comienzo a dibujar. No recuerdo el minuto anterior al actual, ya con cinco de los mismos, con palabras dibujé una capital.

Salgo y corro, arranco y me escapo, sé que no puedo, no sé de quien debo. Ahora me detengo y vuelvo al comenzar, saco un cigarro y sentado, comienzo a fumar …

martes, 20 de mayo de 2008

el mar y la lluvia


El mar se hace pequeño y los peces se ponen celosos, porque disfruto más la lluvia que el mar durante el día. Porque siento más nostalgia al ver una gota a contra luz, que la espuma entre medio del sol quien se recoge con alegría.

El mar siente envidia, porque no puede descansar, la señora lluvia sale de día y si quiere en la noche termina, cae y sin perder y cuando escapa no te olvida, las olas solo se pierden y caminan por la orilla.

El mar quiere amor y la lluvia tan solo ríe, nos engaña con las nubes, hace el amor con las espinas. El mar no logra ver y la lluvia tan solo mira, como el mar interminable por ella escribe poesía.

El mar no tiene respeto y la lluvia solo alucina, las estrellas la invitan a un trago y el sol al mar lo inclina, solo se trata de un poco de juego, entre Dios y la vecina, yo soy el mar y tú la lluvia, esa que me llena de agua durante mi vida …

domingo, 18 de mayo de 2008

Una fiesta extraordinaria

Una fiesta extraordinaria, y no era por lo todo, menos por el ambiente, por nada que fuese oscuro. Todo se tornó distinto, las luces saludaban, me indicaban una mirada y yo … no hacia nada.

Lo único que iba quedando era hablar un rato con mi reloj, no tenia respuesta alguna, en eso escucho de lejos tu voz, eras tú, linda, dulce, distinta … como ninguna

Ahora la fiesta comenzaba, después de tres horas de su inicio, yo me llamo pipo y tú … prefiero no decirlo, el miedo de lo desconocido … lo tierno de lo divino

Y Dios me susurró al oído, que tú seguías aquí, luego de unos instantes, yo te perdí. Me desespero y lo demuestro. Busco, miro y no te encuentro y cuando Dios me susurra de nuevo, me indica tú pradera …

Poco y nada hemos hablado y cuando lo hicimos no quise despegarme de tú lado, y, ¿porqué no me tomas de la mano? … te juro por quien nos juntó que no me iré …

Y ahora se vuelve eterno, todo extraño y nulo pensamiento, que en ti quedó mi recuerdo, mis ojos por los tuyos quedaron perpetuos …

domingo, 11 de mayo de 2008

sutil mentira

Oye, y seguí creyendo que te estoy mintiendo y lo que hablo son puras estupideces. Es obvio que lo son, pero mentiras, jamás!.

Un día escuche que el mundo suele pasar cada vez más rápido, quizás por lo mismo tiendo a caminar de forma más apresurada y a tratar de vivir de forma menos cotidiana, no lo sé. Ahora bien, si nos pasamos preguntando todo el tiempo lo mismo, claramente todo se torna más aburrido, fome, desechable, deja ver como pasa el puto mundo, déjame ver.

Dime donde mierda vas y yo te diré porque no creo en ti, dime en quien piensas y despacito te daré un beso sin que te des cuenta, créeme que no miento, te robaré un tono, un azul o talvez un rojo, un amor o simplemente pasión, pero mentirte, ya dije que no.

¿Aún insistes que el mundo está más rápido?, y ¿porqué? … ya me estoy quedando dormido con tú recuerdo y los ojos se ponen de acuerdo que película me van a regalar esta noche. ¿Y tú?, ¿qué me darás? …

Yo simplemente una verdad …

domingo, 4 de mayo de 2008

Estrella

La luna se vistió de gala para recibirme, yo estaba un tanto nervioso, me miró sin parpadear ni menos en la noche olvidar, no pasa un segundo y me pregunta lo peor: ¿qué necesito para estar mejor?

Me fui un tanto derrotado, merecía llorar pero no quería hacerlo tampoco, solo volaba, entre medio de estrellas que reían por mi desgracia y cuanto negro se te ocurra que me quería pintar un poco más, tan solo un poco más.

Llegue a tierra y tome una copa, bebí el vino que mi tata me dijo un día que bebería. De nombre nostalgia, con aroma amor.

Ahora me doy cuenta que tú trago fue mejor que el anterior.

Me fui un día a caminar, no preguntes donde, no tenia idea donde llegar, pero cuando me detuve por un destello, era una estrella nueva que no reía sino que era ella. Ella con tú nombre y con tonos de ternura, con matices especiales nunca antes vistos, un telar de oriente de los mejores existentes …

tú eras poesía, un verso rosado con un toque a margarita.




Porque te vi y no lo supe, menos inventé
Que bastarían segundos para querer volver
Y reírme yo de la luna y la noche entera
Que eras tú la verdadera y mi única estrella

viernes, 2 de mayo de 2008

Eso es todo y se llama sueños

Cerraste la cortina que acompañaba de lejos al mar, esperaste despierta unos minutos antes de salir hacer el desayuno. Yo, mientras jugaba con mi pies y miraba tu cuerpo esperando con ansias un primer beso.

Abriste la puerta sin preguntarme ni tampoco decirme donde ibas a ir, supuse en el inicio del momento que ibas a la cocina, luego más tarde me percaté que no regresarías.

Y me dieron un par de horas más, Dios aún no me ayudaba a darme cuenta que me tenia que levantar. Escuchaba pasos fuertes pero no eras tú. No era nadie, era todo parte de mi imaginación, ¿lo serias también?

Seguí y seguí con mi cabeza pegada a la almohada, mirando aquella puerta que en la mañana estaba cerrada y que con tanta facilidad lograste abrir, caminar, salir.

Ya el sol se despidió y la luna me saluda de pronto, todavía no reconozco que el día murió. No quiero, no debo, menos puedo. Como si un familiar haya fallecido y yo no lo quiero aceptar. Como tú que anoche en mi creaste un recorrido y ahora no estás.

Hace erupción mi corazón y lo poco y nada de sangre se derramo, se inmiscuyo entre las sabanas, se rió del cubrecamas y de mi se despidió.

Al momento de mis ojos cerrar, me doy cuenta que los abro y cuando reconozco el paladar me doy cuenta que tú nunca en mi vida, estuviste, estás y vas a estar …

jueves, 1 de mayo de 2008

Arco iris


Bajando por el tobogán que forma el arco iris de nuestros pensamientos, una lluvia de rosas adornan tus sueños y yo, tan solo sigo despierto. Imagino que somos parte de un cuento corto, de esos que no son ni fomes ni entretenidos, tan solo cortos, para leerlos en el baño o dormir un rato.
Tú, desolazada, intranquila por lo que vendría después de aquella neblina, que tiene lo brazos abiertos para recibirnos. Y me apretas fuerte hasta sentir dolor, tan profundo y tan posterior que alcanzo a dar gracias a Dios. Una mirada, un cerrar y abrir de ojos, otra que se yo, ¿exaltación?

Gritas un te amo y luego yo respiro, sientes el vacío que me dejo tranquilo, casi muerto, de envidia por el dolor que causaste, que cualquier ser humano querría causar. Dame tan solo un minuto, para poder saltar, sacarme la cresta, morir y luego volver a levantarme, vivir, partir, seguir, a ti.

Y cuando termina la fiesta de colores en nuestros culos mira a mi lado y no estás, solo la marca de tú plácida mano que rompió el rumbo, las cosas, la física, la química, tan solo una rutina genial.

Vuelvo a respirar, esta vez por si solo, porque el te amo se desvaneció y tu mano junto a la mía desapareció