Orgasmo
“gotas sucias dejamos caer, que se mezclan con llantos sin querer, aprendemos a rezar y mañana olvidamos, que el perdón que buscamos otra persona lo a abandonado …”
Martina mira el cielo y no ve más que la tormenta, esa traviesa y linda que juega con ella. Un juego de seducción, sexo del que no hablamos, caricias varias que en agua se han transformado.
“me excitas y me dejas, me calientas y me recuerdas, como todo lo que busqué esta conmigo sin planetas, esos que recorrí sin tener rumbo alguno, ahora que lo sé espero que el tiempo me regale un segundo …”
El tiempo es morboso y juega a ser poco, después de cuatro horas Martina sigue en la ducha, espera lo que no quiere esperar, un grito que le anuncie que es hora de acabar.
“el orgasmo me saludo y luego como maricón me dejó, sin despedirse de un beso ni tampoco un te quiero, el alubión se calma y las nubes se escapan, me doy cuenta que los relámpagos no son más que otros pasos …”
Ella detenida en medio de la neblina, esa que se forma como toda mañana hoy es de día, sabe que mojada completamente está, como una niña aún cree que así se podrá secar. Nada la apresura tan solo su ansiedad, esa de no moverse, quedarse quieta y nada más, no espera nada y lo vuelvo a repetir, no creas que es lo mismo, ahora es otro el frenesí.
“No quiero una toalla para que me robe tus roces, no quiero una caricia ya son muchas por este norte, no quiero un perdón, olvidé lo que es amor, tendré que aprender como lo hice ayer …”
Está vez se convence y sabe bien que tendrá que partir, nuevamente le da pena otro día que vivir, sabe bien que es de nuevo la vida de mierda nos tocó, sabe bien que el mundo entero en una mierda se transformó.
1 comentario:
¡¡¡¡¡Bello bello!!!!!
Lo demás ya te lo dije.
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